lunes, 12 de abril de 2010

BICHOS




Las únicas peleas que merecen la pena son aquellas que tenemos con nosotros mismos. Y por más acostumbrados que estemos a esta dinámica siempre encontramos nuevos pliegues y recovecos sin explorar...



Aquí estoy hoy, viendo venir hacia mí manadas, bandadas, grupos, inmensos grupos de bichos vivientes, que se acercan más y más, pero que nunca me alcanzaran, no llegaran nunca. Pero venid ustedes sí podéis  venir, yo estoy a vuestra disposición, ya os distingo de esa masa de bichos con vida. Me habéis alcanzado, sentaos, esos bichos nunca nos alcanzaran. Podemos empezar, comenzar a dialogar:

Este hombre es un genio, no se le puede superar, rompe todos los esquemas y me da una música algo fuera de lo normal, solo digna de su categoría, pero recordad solos, esos bichos no nos alcanzaran jamás. ¿Que os parece?...

No. ¡No! , así nunca lo conseguirás, estas luchando solo. Aquí hay alguien al que necesitas, no eres especial, no eres superior y Él como tú lo sabe y te ayuda piénsatelo...

¡¡ ¿Que no te hace caso? ! !. Desbloquéate, olvídate de todo, desemboca en un amigo más cercano y luego vuelve a Él. Es increíble pero sigue ahí, piénsalo igual Él también te necesita, es, es increíble. ¡Adelante !, sigue...

¿ Loco ?, yo loco, me haces reír, loco, bendita locura, locura que a mi me permite seguir viviendo, locura que hizo santos a otros, pero quizás me equivoque, igual estoy equivocado. No, no creo...

¡No !, estas equivocado. Todo lo que te pasa es tu culpa. No culpes a otro, resulta fácil y calma tu ansiedad aunque tú sabes que fuiste tú. Piénsalo, recapacita, mueve de nuevo las fichas, mentalmente, cambiando de lugar aquellas que estén mal colocadas. Ahora sí da, ¿verdad ?, has visto fue tu culpa, no te preocupes, sigue trabajando...

¿Que para qué ese trabajo ?, recuerda estamos solos, no tienes que disimular ; plantéate tu situación, estas aquí, ya has dado más de un paso fundamental en tu juego, ya no es un juego, estas desarrollándote en un ambiente, ese ambiente no es fácil, no puedes escapar, te puedes evadir, tu hermano lo hace, ¡no !, piénsalo, no es fácil, pero es tu reto, no puedes perder, adelante, no has salido solo de esa masa de bichos vivientes, sigue con los que siempre te han ayudado, ayudándonos todos conseguiremos todo, adelante...

¡No !, no lo pueden hacer por ti. No sabes cuan odiosa es la vida con abusos de poder, no, olvídate de eso.

Quizás esto te ayude, quizás no, quizás cambie tu opinión sobre mí, pero no te preocupes, continua esos bichos no te alcanzaran jamás... JAMÁS.


1990

martes, 6 de abril de 2010

EL MAPA DEL TESORO

Sabéis, creo que todos y cada uno de nosotros somos un gran tesoro; y  aunque puede que todo  sea su búsqueda incesante, estoy convencido de que la aventura no termina con el hallazgo...



Hasta encontrar el tesoro habrá que caminar mucho, nos encontraremos caminos llanos, escarpados, anchos, angostos, abiertos, luminosos, en pendiente, con  fuertes bajadas, bien de firme, llenos de baches; puede que perdamos el camino y tengamos que adentrarnos en bosque umbríos o cuevas oscuras para recuperarlo, puede que nos encontremos con pequeños arroyos o grandes ríos que haya que vadear o cruzar...

A lo largo del camino encontraremos lugares tranquilos, encontraremos también lugares áridos e incómodos,  encontraremos caminos sin pisada alguna y otros con muchas huellas, que igual puedan guiarnos en un determinado cruce o despistarnos en una ruta aparentemente sencilla.

Tendremos que estar atentos, preparados, ¿como será el tesoro que andamos buscando?, ¿nos desilusionará?, ¿encontraremos falsos tesoros?, ¿nos conformaremos con un tesoro cualquiera, con tesoros pequeños?...

Un día en lo alto de una montaña, debajo de una piedra, en el fondo de una cueva, en la cuneta del camino, no sé donde, encontraremos el tesoro; todo lo que somos será una sola cosa y donde parece que tendría que acabarse el camino, comenzará la verdadera aventura.

 ¿Que haremos con el tesoro?

Lo cambiaremos de sitio y lo enterraremos profundo para que nadie más lo encuentre; trazaremos un mapa para poder volver a localizar el tesoro y lo dejaremos ahí o cargaremos con el tesoro el resto del camino; mantendremos en secreto el hallazgo o divulgaremos que lo hemos encontrado.

¿En que invertiremos tanta riqueza?

Nos dedicaremos solo a reinvertir el dividendo o pondremos el capital en juego; saldremos fuera o ampliaremos nuestra propiedad privada; volveremos al mundo o desapareceremos de él.

En definitiva, ¿nos serviremos del tesoro o serviremos a una causa grande?


Marzo 2010